La crema humectante actúa en forma de barrera protectora en la piel, evitando la evaporación del agua que contiene el tejido.
Debemos considerar los ingredientes que contiene ―glicerina, urea, alantoína y pantenol―, para no comprar lo que no necesitamos.
Mientras la crema humectante hará su función sobre la superficie de la piel, de manera externa; la crema hidratante es la que aporta la cantidad de agua que necesita la célula para sus funciones metabólicas, por lo que, actúa de manera interna sobre capas profundas de la piel. Las cremas hidratantes pueden ser simples o complejas.
Las simples son a base de lanolina y aceites vegetales. Las compuestas, de vitaminas, sales y minerales.
Es importante enterarnos qué contienen las cremas humectantes e hidratantes, pues eso nos ayuda a poder adquirir un producto, de cualquier marca y a un precio accesible, con los elementos necesarios para obtener los mejores resultados para nuestra piel. Lo caro no siempre es lo mejor.
En resumen…
Cuando hablamos de hidratación nos referimos al agua que llega a la piel desde la sangre. En cambio, por humectación, entendemos el modo en que la piel retiene los aportes de agua provenientes del exterior, mediante distintos preparados que contienen agua y otros elementos de origen vegetal, animal o mineral.
¿Cuándo aplicarlas?
Es importante recordar que la piel debe estar limpia y tonificada antes de usar la crema hidratante y, posteriormente, la humectante, al comenzar la rutina del día. En la noche, debe preparar su piel de la misma manera pues ¡es cuando la piel se alimenta de lo que encuentre en la superficie!
Tips sobre el manejo de cremas
Debemos ser muy cuidadosos al momento de aplicar éste y otros productos de belleza.
Recordemos que la higiene debe ser parte de nuestra rutina de belleza y cuidado de nuestra piel.
Si usas un producto ―en caso de que la presentación sea de tarrito―, y lo vas a tomar directamente con los dedos, asegúrate de lavarte bien tus manos, de lo contrario se puede infectar tu piel; además, es mejor NO compartir tus productos personales.
Recuerda también que los productos tienen una fecha de vencimiento.
Ejemplo: Si el tarrito lleva 9M por la parte de atrás, deberías usar el contenido del tarro o tubo antes de los 9 (9M) meses desde el momento en que lo abriste, ya que empieza a oxidarse con el aire cada vez que lo abres. Por lo tanto, te recomiendo cerrar bien los envases cada vez que los uses.